Imitando el formato de las charlas de TED, esta mujer, Kate Cooper, quién en realidad es una actriz, se presenta como asistenta de marketing alimenticio ante una audiencia que espera una amena charla. Comienza metiéndose al público en el bolsillo, pero conforme va desvelando la verdad sobre el marketing en los alimentos el público se va sorprendiendo hasta el punto de no querer aplaudirla al final de la charla. Ante sistemas de producción alimentaria que en muchos casos son salvajes con los animales, se necesitan grandes campañas de marketing para maquillar los productos. Personas como ella existen en la realidad y aunque están reguladas las campañas de las marcas que representan, consiguen engañarnos sorteando la legislación.
Vale, ahora mira la palabra “Artesanas”, pone “Artesanis”. Les prohibieron llamarse artesanas porque no lo eran, y para hacernos creer que lo son y para que siguieran siendo legales, jugaron con el logotipo añadiendo un punto.
Pero aquí no termina todo. ¿Os acordáis de la marca Bío?, puesto que sus artículos no eran de “agricultura biológica” les prohibieron incluir la palabra Bío, y ahora son “Bi”. Pero aquí no termina todo. También está prohibido decir que un alimento quema grasa cuando no la quema, por lo que en sus galletas devoragrasas, realmente pone “devoragras”
Fuente: LaVozDelMuro
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