Mientras Washington sanciona el programa atómico de Irán, realiza ensayos subterráneos en Nevada. Bronca de otros países, que subrayan que viola el llamamiento al desarme mundial.
EE.UU. realizó una prueba nuclear subterránea y limitada en el estado de Nevada, para no desencadenar una explosión atómica, con el objetivo de estudiar el comportamiento de sus arsenales.
La acción, realizada el pasado miércoles, es la vigésimo séptima realizada por Washington desde febrero de 2011 a pesar del acuerdo mundial del llamamiento al desarme atómico.
En repudio, el viceministro de Exteriores de Irán, Ramin Mehmanparast, subrayó que esta prueba confirma que Washington sigue con sus políticas de desarrollo de armas de destrucción masiva a pesar del llamamiento internacional para el desarme nuclear.
EE.UU. y otros países de Occidente mantienen fuertes sanciones económicas contra Irán por el programa de enriquecimiento de uranio de la república islamista, que sostiene que su uso es meramente pacífico.
En tanto, el alcalde de Hiroshima, Kazumi Matsui, sostuvo: “Me pregunto porqué el presidente Obama, que prometió buscar un mundo libre de armas nucleares (en la Asamblea de la ONU), llevó adelante este ensayo”.
El secretario general del Consejo de Sobrevivientes de la Bomba Atómica de Nagasaki, Hirotami Yamada, afirmó que “es deprimente que EE.UU. no entienda cómo nos sentimos a pesar de nuestras reiteradas protestas”.
“Esto es prueba de que EE.UU. podría utilizar armas nucleares en cualquier momento. Este país no está calificado para ser un líder mundial”, se quejó.
Fuente: DiarioGazeta
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