Ningun conocimiento se nos da si no existe en nosotros la voluntad de conocer, ninguna droga nos salva si no queremos ser salvados.


"La experiencia más hermosa que podemos tener es lo misterioso. Es la emoción fundamental de la que
nace todo arte y ciencia verdaderos. Quien no la conozca y ya no pueda sorprenderse ni maravillarse, es
como si estuviera muerto y sus ojos estuvieran cerrados"

"Nada de lo que escuches, sin importar quien lo diga.
Nada de lo que leas, sin importar dónde esté escrito.
Nada debes aceptar, sin previo discernirlo.
Y por ti mismo, deberás decidir su validez o no.
¡Investiga!"


viernes, 22 de marzo de 2013

Sé tu mismo, nada más que tu mismo

A la gente se le adiestra para ser actores; en todo el mundo verás que toda la gente actúa. A todos se les educa para actuar… nombres muy bellos -etiquetas, maneras-, pero detrás se oculta una psicología sutil para hacerte olvidar tu originalidad y para que te embebas del papel de actor que los intereses creados te tienen asignado.

 

 

Nunca te sientas inspirado por nadie. Permanece abierto. Cuando veas un hermoso atardecer, disfruta de su belleza; cuando veas a un Buda, disfruta de su belleza, de su autenticidad, de su silencio. Disfruta la verdad que ha realizado, pero no te conviertas en su seguidor. Todos los seguidores se pierden.

Sigue siendo tú mismo, porque los hombres como Gautama Buda se encontraron por ser ellos mismos. Todos esos hermosos nombres: Lao Tse, Chuang Tzu, Lieh Tzu, Bodhidharma, Nagarjuna, Pitágoras, Sócrates, Heráclito, Epicuro, todos aquellos que han sido fuente de inspiración para tanta gente, eran ellos mismos y nunca se sentían inspirados por nadie. Así es como protegían su originalidad y seguían siendo ellos mismos.





He estado con maestros y los he amado. Pero para mí, el deseo mismo de ser como ellos es feo. Con un hombre es suficiente; otro igual a él no enriquecerá la existencia, sólo será una carga.

Para mí, la unicidad de los individuos es la mayor verdad. Ama a la gente que encuentres auténtica y verdadera en alguna dimensión, la gente que esté floreciendo. Pero recuerda que están floreciendo por su autenticidad y su originalidad; por eso no caigas en la trampa de seguirles. Sé tú mismo.




La famosa máxima de Sócrates es: «Conócete a ti mismo.» Pero no está completa. Antes de «Conócete a ti mismo» hace falta otra máxima: «Sé tú mismo»; de otro modo quizá llegues a conocer al actor que aparentas ser. Conocerte es lo segundo; lo primero es ser tú mismo.


Sé tú mismo, nada más que tú mismo, simplemente tú mismo. Y recuerda que estás arriesgando mucho cuando declaras que eres tú mismo. No perteneces a ningún grupo, a ningún rebaño. Todos son rebaños: los hinduistas, los musulmanes, los cristianos, los comunistas. Te estás declarando un individuo, sabiendo perfectamente que es peligroso. Tal vez la multitud nunca te lo perdone. Pero es tan bonito arriesgarse, caminar por el filo de la navaja, donde cada paso que das es peligroso. Cuanto más peligrosamente vives, más vives. Y es posible vivir en un instante toda la eternidad, si estás preparado para vivir con totalidad, arriesgando absolutamente todo.




No quiero que seas un hombre de negocios, quiero que seas un jugador. Y cuando estés apostando, juégatelo todo. No te guardes nada para después. Entonces, pase lo que pase, te traerá grandes bendiciones. Aunque te conviertas en un mendigo, tu ser será mucho más majestuoso que el de un emperador .

La humanidad no puede caer más bajo. Pero ha caído; ha olvidado la risa que tienen todos los niños al nacer; ha perdido el camino hacia el bienestar y la integridad.




La puerta se abre en este mismo instante, siempre en el aquí y ahora, donde se cruzan continuamente la vida y la muerte. Has elegido orientarte hacia la muerte porque les interesa a los que están en el poder, y has olvidado que la vida va pasando mientras te ahogas en la tristeza.

Una vez, un discípulo le preguntó a Confucio cómo ser feliz, cómo ser dichoso. Confucio le dijo: «Estás haciendo una pregunta muy extraña, son cosas naturales. Una rosa no pregunta cómo ser una rosa.» En lo que se refiere a la tristeza y la desdicha, tendrás mucho tiempo cuando estés en la tumba; entonces podrás ser desdichado a tus anchas. Pero mientras estás vivo, estate totalmente vivo. De esa totalidad y de esa intensidad surgirá la felicidad y, sin duda, un hombre feliz aprende a bailar.


Queremos que toda la humanidad sea feliz, baile, cante. Entonces todo el planeta será maduro, su conciencia evolucionará. La conciencia de un hombre desgraciado, triste, no puede ser muy penetrante; su conciencia es débil, mortecina, pesada, oscura. Sólo cuando te puedes reír sinceramente desaparece toda la oscuridad como en un destello. OSHO  

Soy feliz por que acepto a los demás como son sin barreras ni obstáculo no importa raza ni culturas por que todos son igual que yo.
Soy feliz repartiendo la paz y el amor que tengo dentro de mi corazón.
Soy feliz aunque la mayoría no, me ásete por que soy yo misma y libre como el viento.


Soy feliz a por que soy yo misma, y no una marioneta de lo demás.
Soy feliz a pesar del dolor y el sufrimiento.
Soy feliz por que soy libre como el viento y vosotros también podéis ser libre  siendo vosotras misma .
Mari.     
                                        

Fuente: StopSecrets

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