El doble rasero del Consejo de Seguridad: Siria ha repudiado el doble rasero de algunos miembros del Consejo de Seguridad de la ONU, que por un lado combaten supuestamente al terrorismo en Malí y por otro lo amparan en territorio sirio.
"Mientras algunos países, en particular occidentales, pretenden luchar contra el terrorismo en Malí -y nosotros apoyamos esta lucha donde sea-, al mismo tiempo, apoyan ese terrorismo y a los mismos grupos terroristas en Siria", reza la carta abierta enviada este miércoles por el ministerio sirio de Asuntos Exteriores al Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (CSNU).
La cancillería siria denuncia el mutismo del máximo órgano de seguridad internacional ante los crímenes que cometen las bandas terroristas contra la población y el Gobierno sirios.
La misiva deplora que el Consejo de Seguridad a través de su actuación de doble moral cierre los ojos al sufrimiento y pesar del pueblo sirio, y sus miles de víctimas civiles, así como la destrucción provocada por terroristas contra la infraestructura.
El ministerio de Exteriores aseguró que el Consejo de Seguridad "ha fracasado hasta la fecha en condenar estos actos terroristas", ignorando en sus resoluciones la voluntad de la comunidad internacional que exige el cese de dichas matanzas.
La cartera de Exteriores de Siria, en otra carta dirigida al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha exigido una dura condena de este organismo al feroz atentado terrorista lanzado el martes contra la Universidad de Alepo, segundo mayor centro educativo del país, que acabó con la vida de al menos 87 personas y dejó otras 160 heridas.
La misiva agrega que las víctimas del ataque del martes eran estudiantes que acudían a su primer día de exámenes, como parte de su formación para participar en el desarrollo y la construcción de su país.
De acuerdo con el texto, el ataque de ayer no fue el primero lanzado por las pandillas armadas contra los complejos civiles; anteriormente, los terroristas habían realizado atentados contra dos mil 362 escuelas y centros educativos a nivel nacional, que han resultado en el asesinato de decenas de niños y maestros inocentes.
La Cancillería asegura además, que los Estados regionales y occidentales que patrocinan a las bandas armadas, no podrán disuadir al Gobierno sirio de proteger a sus ciudadanos, estudiantes y escuelas, y que Damasco no dará un paso atrás en su lucha contra el terrorismo.
Desde marzo de 2011, Siria vive sumida en una ola de violencia provocada por grupos terroristas armados, financiados desde el exterior, que buscan derrocar al legítimo Gobierno de Damasco, asesinando a civiles inocentes.
Fuente: Insurgente
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